¿Por qué no es lo mismo hablar de moda que de estilo?

Fechas de vencimiento versus una personalidad definida

Vengo a derribar mitos y a contarte por qué, para mí, debería ser más importante que expreses tu estilo que perseguir incansablemente lo que se defina como el último grito de la moda.

Lo más importante para comenzar a hablar del tema en el día de hoy es que no es lo mismo la moda que el estilo.

La moda como tal es efímera, es una tendencia que viene impuesta por los grandes y conocidos diseñadores. Por el contrario, hablar de estilo es algo individual que cada persona tiene y que puede llegar a pensarse como único; en general una persona tiene un estilo marcado durante mucho tiempo en su vida.

¿Cómo se define la moda?

La moda es un fenómeno de masas, es más bien algo que se piensa como para que un colectivo de gente la siga, aunque, no es para todos.

Hay un estilo definido que dura lo que una pluma al viento, sí, ¿sabías que el tiempo promedio de una tendencia en moda solo dura dos meses? Poco, ¿verdad?

Hablar de la moda aunque no se quiera seguir ciertos patrones, nos viene como medio impuesta, porque aunque muchas personas la aceptan y les gusta; también están los otros mortales que se ven obligados a seguirla de cierta forma aunque no les convenza demasiado.

¿A ti también te pasó que de repente no te gusta la moda de una temporada en particular, pero no encuentras otra cosa en las vidrieras?

Fuente: Revista GQ

Emporio Armani, Versace, Louis Vuitton, Dolce & Gabbana, entre muchas marcas conocidas a nivel mundial se encargan de crear los diseños que marcarán las tendencias de moda cada temporada, cada año.

Estos grandes monstruos de la industria se apoyan en los medios de comunicación, desplegando grandes pasarelas con cientos de modelos, le pagan a artistas de cine y tv y presentadores para que usen esta ropa en público ¡vemos moda hasta en la sopa! y parece que no pudiéramos huir de ella.

Para que el sistema de la moda siga generando cientos de millones es necesario cambiar la moda cada dos meses, Así que quien siga la moda y solo se vista de diseñador, para cuando piense usar toda la ropa y accesorios, inmediatamente la temporada y la moda habrá cambiado creando una nueva. Esto da como resultado que todo lo que se tiene en el guardarropas al cambiar de estilo, ya quede viejo.

Pero sin duda, lo peor para mí es que esa persona que sigue ciegamente cada tendencia se convierte en una persona sin estilo propio, sin personalidad.

Fuente: S.moda

Sé fiel a tu personalidad y crea tu propio estilo

Como te comentaba antes, el estilo es personal y único, cada cual tiene un estilo que, en general, va ligado a la personalidad. Cuando nosotros nos referimos a reflejar por fuera quién se es por dentro, nos referimos a eso.

¿Cuántas veces te cruzas con personas que al conocerlas mejor las ves atrevidas y arriesgadas, pero que al verlas a primera vista dan otra imagen?

Muchas veces coincide en que la personalidad se refleja por fuera, en su postura, en su forma de vestir, el corte de pelo, etc y otras veces no, nada que ver. Hasta te sorprendes que por fuera “dice una cosa” y por dentro es una caja de sorpresas.

El estilo no solo se limita a la forma de vestirse, va mucho más allá, incluso de los accesorios. Es la actitud, el modo de comportarse lo que vuelve a cada persona original y distinta a las demás.

¿Cómo encuentro mi estilo?

En mis charlas con amigos —¡sí!, con mis amigos también hablo de moda y estilo de tanto en tanto— suele salir a flote el tema del estilo de cada uno, porque cuando nos sentamos en una mesa y viene alguien que no nos conoce del todo, puede identificar fácilmente la personalidad de cada uno, todos tenemos un estilo muy marcado.

Aunque, quiero aprovechar para decirte que el estilo que elijas no tiene que ser estrictamente uno en particular, puedes sentir la influencia de alguno en algún ámbito especial como el trabajo y, sin embargo, que en otros ambientes tu estilo sea más creativo y arriesgado. El estilo se adapta a las circunstancias, no es algo estático.

6 estilos universales que puedes adoptar

Clásico: Es un estilo tradicional, sobrio, minimalista, elegante y sofisticado.

Romántico: Se distingue por las texturas y los tonos claros.

Puro: Se caracteriza por ser natural, simple, cómodo y discreto. Los accesorios no son tan llamativos.

Creativo: Rompe las reglas al mezclar colores, prendas y texturas. Sin duda es un estilo que llama la atención por ser dinámico y divertido.

City chic: La elegancia, sofisticación hace que estas prendas se caractericen por ser arriesgadas y a su vez elegantes.

Vanguardista: Es atrevido, audaz y arriesgado. Predominan las prendas y accesorios fuera de lo común, son asimétricas con texturas, estampas y de colores diferentes.

Y para cerrar este artículo de blog, te recomiendo que para inspiración utilices las herramientas de Pinterest o Instagram, donde podrás ver cómo otros mezclan prendas donde se refleja el estilo personal y donde, sobre todo, se potencia la imagen de lo que queremos mostrarle al mundo.

Atrévete a definir un estilo y no olvides nunca esta frase que escuché por ahí pero refleja bien lo que venimos hablando.

“Como te ven te tratan y si te ven mal te maltratan”

Recuerda que en Millam podemos asesorarte con los accesorios para complementar tus outfits.